29 mayo 2014

Reseña: Diez

Diez negritos.
Cuando Meg y Minnie reciben una misteriosa invitación a una fiesta en Henry Island, no dudan en mentir a sus padres para no perdérsela. Es una oportunidad única antes de empezar la universidad. Al llegar a la isla, conocen a los otros ocho invitados y encuentran un DVD con un siniestro mensaje: «La venganza es mía». Meg empieza a sospechar que algo no va bien. Una terrible tormenta los deja aislados sin electricidad ni wifi, y faltan cuarenta y ocho horas para que llegue el próximo ferry. El primer cadáver puede interpretarse como un suicidio, pero aparece otro... Entonces, Meg comprende que el mensaje iba en serio. ¿Podrán Meg y Minnie salir con vida?
Diez es una novela que no parte de una premisa original, pero sí que trata de darle un toque diferente con personajes jóvenes y una historia de fondo que vamos descubriendo poco a poco. Aunque no nos ofrezca nada nuevo dentro del panorama literario, sí que se aleja de las típicas publicaciones de corte juvenil, además, nos encontramos ante una historia bien medida y calculada y muchos misterios que descubrir.
Meg no es la típica adolescente y queda lejos de ser una chica popular, pero a ella todo eso no le importa, al menos tiene a Minnie. Por ello, cuando le llega una invitación a la fiesta de una de las chicas más populares del instituto le resulta un poco extraño, pero a Minnie le hace tanta ilusión que accede a asistir con ella. Sin embargo, cuando llegan a su destino, descubren que la fiesta es un tanto distinta a lo que esperaban. La supuesta anfitriona no está por ninguna parte, los teléfonos no funcionan y un extraño mensaje aparece en la televisión cuando intentan ver una película, pero lo más escalofriantes llega cuando una de los diez invitados aparece colgada de una viga. Y ya sólo quedan nueve.
Este tipo de historias me encantan, plantean muchos interrogantes y, por suerte, Diez consigue resolverlos todos sin necesidad de dar demasiadas vueltas de tuerca, ofreciendo una historia sin complicaciones pero con las dosis adecuadas de misterio e incluso un toque romántico. La historia está bien contada y, lo que es más importante, tiene sentido aunque haya un par de detalles que podían haberse pulido un poco más.
Lo más importante es que la autora consigue confundirnos durante toda la novela, mandándonos señales confusas para que sospechemos de todo el mundo hasta llevarnos a un final en el que algunos se sorprenderán más que otros pero que, sin duda, consigue satisfacer al lector y su curiosidad.
McNeil no se limita a contarnos lo que sucede en la isla, sino que dota a sus personajes de un trasfondo, centrándose, especialmente en Meg y T.J.. Sin embargo, Meg me ha parecido una protagonista un tanto insulsa y carente de carácter, y aunque eso tenga sentido dentro de la historia y sea debido a su relación con Minnie, a veces resulta un tanto cansino ver cómo se "sacrifica" una y otra vez por no hacer daño a su amiga, quien, claramente, no tiene ningún miramiento a la hora de fastidiar un poco a Meg. Lo importante, en cualquier caso, es el elenco de secundarios que los acompañan y como, poco a poco, vamos descubriendo las conexiones que los unen.
Queda claro que Gretchen McNeil no es una autora de novela negra, pero se defiende bien. Es capaz de desorientar al lector y engañarlo una y otra vez, por no hablar de su estilo ágil, fresco y directo. Debo reconocer que gracias a esos dos ingredientes, me mantuve pegada a las páginas del libro casi de una sentada.
Puede que Diez no sea la novela más original que nos podamos encontrar, pero sí que es una buena novela, bien construida y ejecutada, con mucho misterio, algo de terror, un poco de romance y que mantiene a los lectores pegados a sus páginas hasta que consiguen descubrir quien anda detrás de todo lo que sucede en la pequeña isla. Ideal para aquellos a los que le gusten los misterios y leer entre lineas para deducir quien es el responsable.

Valoración
3,5

Ficha
Título: Diez
Título original: Ten
Autora: Gretchen McNeil
Traducción: Daniel Hernández Chambers
Año: 2012
Edición española: 2014
Editorial: Maeva Young
ISBN: 9788415532859
Gracias a Maeva Young por el ejemplar para la reseña.

22 mayo 2014

Zona de intercambio

Nueva actualización de la zona de intercambio. He quitado libros que llevaban demasiado tiempo buscando dueño y que irán pronto a ser donados. Por otro lado, revisando mis estanterías, he decidido deshacerme de más cositas, algunas, creo, muy interesantes.

Lista de los libros:
Llévame allí de Susane Colasanti
Cosas de brujas de Brittany Geragotelis
Antídoto de Judit Sadurní
Los Náufragos de Charlotte Rogan
Oscuridad de Elena P. Melodía
Acorralado y Acosado de Kevin Hearne
La chica de fuego y espino de Rae Carson
La caza de Andrew Fukuda
Toma mi alma de Rachel Vincent
Las tejedoras de destinos de Gennifer Albin
Trono de Cristal de Sarah J. Maas
Corazon de fuego de Moira Young
Trilogía Play de Javier Ruescas
Paranormal de Kiersten Ehite

En inglés
Mystic River de Dennis Lehane
My Name is Memory de Ann Brashares
The Goddess Test de Aimée Carter
Ghost Huntress. The Awakening de Marley Gibson
Trilogía Revenants de Amy Plum

Si te interesa alguno, mándame un mail a equinoccioblog[at]gmail[dot]com con los libros que te interesan de mi lista y un enlace (o archivo) con la lista de libros que tú intercambias. Hay algunos que prefiero no separarlos a la hora del intercambio, pero puedo hacer excepciones. No vendo libros. Si lo deseas, puedo enviar fotos de los libros. Algunos de los libros tienen mi ex-libri estampado.
Si no me interesa ninguno de tus libros tenemos dos alternativas:
-Te envío el libro a cambio de que te hagas cargo de los gastos de envío.
-Me envías un libro de Bookdepository por un valor parecido al de los gastos de envío.

15 mayo 2014

Reseña: Amy y Roger

Demos un rodeo.
Amy no quiere que llegue el verano. Su madre ha decido mudarse al otro extremo de los Estados Unidos, y ahora Amy tiene que llevar el coche de California a Connecticut. El problema es que, desde la muerte de su padre en un accidente de tráfico, no se siente capaz de ponerse al volante. Y aquí entra Roger, un amigo de la infancia que también debe viajar al otro lado del país, y que carga con sus propios problemas.
A medida que avanzan, ambos descubrirán que las personas que menos esperas pueden convertirse en las más importantes y que a veces es necesario dar algunos rodeos para llegar a casa.
Siempre me gusta leer historias sencillas, realistas –mas o menos– y con algo de romance. Amy y Roger es precisamente eso, una novela road trip sencilla, con unos protagonistas con cierto carisma y algo de bagaje emocional. Ha resultado ser una lectura muy entretenida y un soplo de aire fresco pues no son muchas las novelas al estilo road trip las que he leído.
Amy ha perdido a su padre y ahora tiene que perder su hogar puesto que su madre ha decidido tomar un puesto de trabajo en Connecticut, en el otro extremo del país. Para ello, su madre ha contactado con una amiga cuyo hijo, Roger, debe ir a pasar el verano a Filadelfia con su padre y así, Amy y Roger emprenderán un viaje que lo va a cambiar todo, sobre todo cuando deciden saltarse la ruta prevista y dar un rodeo para conocer su enorme país aunque en realidad ambos tienen otras cosas en la cabeza.
A través de las carreteras americanas, Morgan Matson nos va relatando la historia de Amy y Roger, su viaje de cambios y encuentros. En cierto modo, este viaje y las decisiones que toman son un desafío a sus propias vidas, sobre todo para Amy, que tiene el peso de la culpa encima y necesita deshacerse de sus ataduras. Quizás me ha faltado ver algo de chispa entre Amy y Roger. Su historia se va desarrollando poco a poco durante el viaje, pero me ha dado la sensación de que todo el tiempo estaban más conectados como amigos que como otra cosa y que no había atracción. Evidentemente, todo el mundo sabe cómo va a acabar la cosa y es precisamente por eso que no he visto esa conexión, esas señales. Por otro lado, el final te deja con ganas de saber qué pasará a partir de entonces, qué les espera, aunque siempre es bueno dejarle algo a la imaginación y construir en nuestras cabezas el futuro de Amy y Roger.
Amy y Roger son protagonistas que funcionan. Amy es una chica cuya vida ha cambiado radicalmente en unos pocos meses y trata de superar no sólo la pérdida de su padre, sino la pérdida de su propia vida tal y como la conocía, ya no trata con los que eran sus amigos y tiene que abandonar el lugar en el que ha crecido, dejando atrás, en cierto modo, el recuerdo de su padre. Roger, por su parte, se ve arrastrado en el viaje que debe emprender Amy hasta su nueva casa, en cierto sentido, creo que falta un poco más de él en la historia, más de su pasado, de su vida. Las motivaciones de Roger son bastante distintas a las de Amy ya que él tiene el corazón roto y necesita respuestas. Son, sin embargo, los personajes que se encuentran por el camino quienes hacen que Amy y Roger vayan cambiando y es el propio roce obligado de pasar tantas horas juntos lo que hace que esta historia se vaya tejiendo.
En cierta medida creo que Morgan Matson ha querido abarcar muchos aspectos que afectan a la vida de chicos de las edades de Amy y Roger; la pérdida de una figura paterna, divorcio, drogas, ostracismo. Creo que lo maneja bien, pero me ha dado la sensación de que podría haber abarcado menos y profundizar más en los puntos más relevantes, como los problemas de Charlie o el propio accidente de Amy, que es, al fin y al cabo, el punto de partida de la novela. En cualquier caso, Matson tiene un estilo fresco y consigue atrapar con su historia, gracias al buen ritmo con el que narra, sin entretenerse en detalles vanos, pero dando forma al viaje de los protagonistas y llenando la novela de referencias a la cultura estadounidense.
Amy y Roger es una novela bonita y sencilla, una historia de amor que se va cociendo página a página y también un pintoresco retrato de los Estados Unidos. Ha sido justo lo que esperaba, una historia entretenida, con momentos divertidos y también algunos tristes, un toque de romance y no demasiadas complicaciones. Sin duda una elección excelente ahora que llega el verano y apetecen cosas ligeras para disfrutar al calor del sol.

Valoración
3,5

Ficha
Título: Amy y Roger. 5000 kilómetros para enamorarse
Título original: Amy and Roger's Epic Detour
Autora: Morgan Matson
Traducción: Aida Candelario Castro
Año: 2010
Edición española: 2014
Editorial: Plataforma Neo
ISBN: 9788416096022
Gracias a Plataforma Neo por el ejemplar para la reseña.

11 mayo 2014

Reseña: Te vas sin decir adios

¡Última parada del book tour!
Desde el amargo divorcio de sus padres, Mclean y su padre se han mudado varias veces; han vivido en cuatro ciudades durante los últimos dos años. Alejada de su madre y de su nueva familia, Mclean ha seguido a su padre dejando el infeliz pasado atrás. Y cada nuevo lugar le da la oportunidad de adoptar una nueva personalidad: pasa de ser animadora a una diva del teatro, hasta que, ahora, por primera vez, descubre el deseo de permanecer en un lugar y simplemente ser ella misma. Tal vez Dave, su vecino, la puede ayudar.
Que Sarah Dessen es una imprescindible para mí no es un secreto. No todas sus novelas me han enamorado por igual, pero siempre han dejado algo en mí. Un sentimiento, un pensamiento, una sensación, algo difícil de describir pero de lo que parecen estar impregnadas las palabras de esta autora. Te vas sin decir adiós es, de nuevo, una novela lejos de las complicaciones, con una trama sencilla, pero con la que el lector se puede sentir identificado.
Las novelas de Dessen están principalmente orientadas al público adolescente, pero yo, con mis casi veintisiete años, siempre aprendo algo de sus libros, porque, a fin de cuentas, la amistad, la familia, el amor, son cosas que están presentes a lo largo de toda nuestra vida y, aunque McLean sea una adolescente, se enfrenta a situaciones que pueden llegar en cualquier momento de nuestra vida. Te vas sin decir adiós es una novela en la que nos encontramos a una chica que ha perdido su identidad tras el divorcio de sus padres, sus amigos son efímeros y el amor no entra en sus planes puesto que en cualquier momento se tendrá que marchar a algún otro lado. Así han sido los últimos dos años de la vida de McLean, a veces Beth, a veces, Lizbet, a veces cualquier otra persona. Nunca se implica demasiado, pero poco a poco se va a ver arrastrada por su vecino Dave, sus compañeras de instituto y por el encanto del Luna Blu, el restaurante que su padre intenta reflotar.
Te ves sin decir adiós es una novela sencilla y lineal. Las circunstancias que rodean a McLean nos son presentadas al inicio de la novela y durante ella se van desvelando también otros detalles que nos hacen comprender un poco mejor porque McLean es como es. Lo que veremos durante las páginas de la novela es la transformación de la propia McLean en busca de su identidad. El efecto que tiene la nueva mudanza en McLean es distinto a las anteriores, podría decirse que el lugar la transforma o la devuelve a su verdadero ser. Una de las cosas a destacar de la novela es que la historia de amor queda en un segundo plano. Es obvia, sí, pero no es el eje central de la novela, la cual, en realidad, lidia con las relaciones de McLean con su madre y su padre. El rechazo que siente por la primera por lo que hizo y la empatía que siente hacia el segundo como víctima. Dessen consigue que el lector entienda los sentimientos de McLean, pero a la vez que no veamos a su madre como un monstruo por mucho que se empeñe la protagonista.
McLean es una chica curiosa, es difícil definir su personalidad porque todo el tiempo está tratando de ser otra persona aunque, en cierto modo, se ve obligada a ser ni más ni menos que ella misma sin contemplaciones. Aunque no puedo entender cómo lidia con el divorcio de sus padres puesto que nunca me he visto en esa situación, sí que puedo entender cómo se relaciona con las personas, cómo intenta no implicarse demasiado o dejar que los demás entren en su vida. Aquí es donde entran los demás personajes como Dave, el vecino superdotado que sólo quiere ser un chico normal o Deb, la chica que siempre se esfuerza por agradar a los demás y que esconde una personalidad de lo más peculiar. O el padre de McLean, que la arrastra a lo largo del país y que ella ve como una víctima aunque él, claramente no opina lo mismo. Todos ellos harán aflorar a la autentica McLean.
Sarah Dessen prefiere no complicarse. Construye sus historias alrededor de un personaje, generalmente con un pasado que no es el más feliz de todos y a partir de ahí cuenta una historia. Son historias sencillas, sin demasiadas complicaciones, pero cargadas de humanidad y con las que, de algún modo, siempre se siente uno identificado, ya sea por la historia en sí o por las situaciones que nos presenta. Te vas sin decir adiós es, quizás, la historia más cotidiana de Sarah Dessen que he leído y quizás, por eso, aunque no esté al nivel de Just Listen, me ha dejado una sensación muy positiva y con ganas de saber qué puede suceder con sus personajes.
Yo tengo muy claro que Dessen es sinónimo de una buena historia. Es una de mis autoras imprescindibles y, aunque no siempre me ha enamorado, sí que consigue dejarme con buen sabor de boca, dándome historias realistas de las que siempre saco algo. Te vas sin decir adiós ha sido una lectura más que entretenida, con un mensaje claro sobre la amistad y la familia y no ha hecho más que fortalecer lo que pienso de Dessen: la adoro.

Valoración
4

Ficha
Título: Te vas sin decir adiós
Título original: What happened to goodbye
Autora: Sarah Dessen
Traducción: Elena Abós
Año: 2010
Educuón española: 2014
Editorial: Maeva Young
ISBN: 9788415893257
Gracias a Maeva Young por organizar el book tour y por el ejemplar para la reseña.

09 mayo 2014

Reseña: El juego infinito

Realidad virtual.
Michael es un hacker de Red Virtual, el adictivo juego de realidad virtual que arrasa entre los adolescentes. Allí tiene amigos de verdad: Sarah y Bryson, y gracias a su capacidad para manipular la tecnología y saltarse las normas pueden exprimir al máximo la plataforma y vivir experiencias al límite.
Sin embargo, la diversión acabará cuando el gobierno dé alcance a Michael... Su objetivo: que les ayude a detener a un jugador sin identificar que está sembrando el pánico en la red.
El juego infinito viene firmado por James Dashner, autor de una trilogía que me fascino, El corredor del laberinto. La premisa era interesante, con potencial, todo parecía indicar que podía ser un bombazo. Sin embargo, El juego infinito no tiene nada de especial, va perdiendo fuelle y se queda en una historia que, aunque bien contada y construida, parece tambalearse.
Michael pasa su tiempo en la Red Virtual, el mundo real no le resulta tan interesante y ante unos padres siempre ausentes, prefiere perderse en un mundo en el que, al menos, tiene a dos amigos de verdad. Sin embargo, todo está a punto de cambiar cuando el juego le encomienda a Michael una misión, evitar el suicidio de una chica. A partir de ahí, Michael sabrá de la existencia de un ser que amenaza la Red Virtual y, por tanto, la vida de todos los que forman parte de ella, por ello, Michael y sus amigos, siguiendo órdenes del gobierno, deben adentrarse en lo más profundo de la Red y destruir a ese ser.
Debo admitir que esperaba más de esta novela que no ha pasado de ser entretenida. Creo que el autor ha buscado lo visual y se ha olvidado de que, después de todo, es una novela. Aunque la historia es buena, los personajes interesantes y el desarrollo de la trama lógico y sentado sobre unas bases claras, a El juego infinito le falta fuerza, gancho, algo que atrape al lector de principio a fin y que le deje con ganas de saber más. Yo, personalmente, no he encontrado nada de eso. Sí, me he entretenido y al principio veía que podía dar mucho de sí, pero conforme iba avanzando, me sentía viajando por un mundo en el que estaba algo desorientada. Suerte para la novela que hacia el final, unos cuantos giros hayan conseguido dar la vuelta a la tortilla y desbaratar todas las teorías que tenía y darme un poco de lo que esperaba encontrar en todas sus páginas. Esas sorpresas finales son las que han hecho que esta novela no caiga en un saco y despierten mi interés por saber qué podrá suceder.
Como protagonista, Michael no tiene nada de especial. Es un chico aparentemente normal con un don para hackear los códigos de la Red Virtual y manejarla a su antojo. En un ermitaño, exactamente igual que Sarah y Bryson, con los que comparte viaje y quienes, a pesar de estar presentes durante casi todo momento en la novela, resultan un total y completo misterio, por no decir que son completamente planos ya que lo único que vemos de ellos es lo que hacen y carecen de mucha libertad de movimiento, o al menos esa es la impresión que yo he tenido.
Debo decir que ver el nombre de Dashner hizo que mis expectativas se dispararan y que puede que eso haya influido en el momento de leer esta novela. Dashner consigue describirnos este mundo virtual con precisión, es fácil trasladarse a sus páginas y sentir que estamos caminando junto a los personajes, pero por lograr hacer algo tan visual, se olvida de otros aspectos, como sus personajes, que, con la excepción de Michael, se limitan a cumplir una función argumental y carecen de trasfondo humano.
Espero que Dashner sepa aprovechar mejor el potencial de su nuevo universo próximamente y que la historia empiece a despuntar. El juego infinito ha sido una pequeña decepción para mí, pero animo a todos aquellos que disfruten con la ciencia ficción y los videojuegos a que le den una oportunidad.

Valoración
3

Ficha
Titulo: El juego infinito
Título original: The Eye of Minds
Autor: James Dashner
Traducción: Verónica Canales Medina
Año: 2013
Edición española: 2014
Editorial: Montena
ISBN: 9788490430941
Gracias a Montena e Ingenio de comunicación por el ejemplar para la reseña.

07 mayo 2014

¡Ganadores!

Siento mucho la demora, pero ya están aquí los resultados del sorteo de aniversario y los ganadores son...

Que corresponden a... Penélope y a Libros Perdidos
¡Felicidades!

Por favor, poneos en contacto conmigo lo antes posible enviando vuestros datos personales y lo que queréis de bookdepository (hasta 12€) a equinoccioblog[at]gmail[dot]com.