Dioses entre nosotros.
Historia
Sombra ha salido de prisión antes de tiempo, pero el motivo no es nada alegre. Su mujer, Laura, ha fallecido en un aparatoso accidente. Sin embargo, en su viaje a casa conoce a un tipo muy extraño, Wednesday, que no sólo sabe quien es él con pelos y señales, sino que le ofrece un trabajo que Sombra no podrá rechazar. Pero en su nueva aventura, Sombra descubrirá que todo aquello que no creía real, lo es, y que parece que el destino de todos está en sus manos.
Opinión personal
Mi relación con este libro viene marcada por el amor-odio, así que quizás debería empezar por ahí y explicaros porqué, pero es que ni yo misma sé muy bien porqué, sólo sé que me alegro de haberlo terminado y que probablemente no vuelva a acercarme a él nunca más, porque a pesar de lo increíble de la historia y lo maravillosa que resulta y lo bien construida que está, es el libro que más me ha costado leer en toda mi vida y no quiero repetir la experiencia.
Sombra está a punto se salir de la cárcel tras una reducción en su condena, pero inesperadamente, 3 días antes de su salida oficial le permiten abandonar la prisión, el motivo: la muerte de su esposa Laura. Sombra, algo hundido al conocer las circunstancias que rodean a la muerte de Laura, conoce a un misterioso tipo, Wednesday, que le ofrece un trabajo, él sólo tendrá que hacer lo que le manden y recibirá una buena cantidad de dinero. Sin embargo, su viaje va a estar rodeado de historias extrañas y Sombra conocerá a los dioses que ahora campan por tierras norteamericanas y que se enfrentan a un terrible enemigo, los dioses de la tecnología.
No sé cómo sería la historia que originalmente fue publicada ya que la que llegó a mis manos fue la edición revisada por motivo del décimo aniversario de su publicación. En el epílogo a esta historia, el propio Gaiman dice que tuvo que cambiar muchísimas cosas de la historia porque sus editores le dijeron poco menos que era un coñazo tal y como estaba, así que la novela vio la luz con otro aspecto y ahora nos llega tal y como Gaiman quiso contarla.
La mitología propia de American Gods es fascinante, así como todos los personajes y los secretos que se tejen entre ellos, pero es una novela terriblemente lenta y pesada. Pasan miles de cosas pero a la vez da la sensación de que no pasa nada y de que te has atascado en la misma página. Paré de leer en varias ocasiones y me tuve que obligar a seguir leyendo y aunque la pluma de Gaiman me tenía fascinada y encontraba interesantísima la historia de fondo, no lograba engancharme de ninguna de las maneras hasta que alcancé las últimas doscientas páginas, en las que la novela pasó de ser un sufrimiento a mantenerme completamente pegada.
Sombra es un personaje que resulta complejo en su simplicidad. Vamos, no tiene un trasfondo demasiado profundo y es bastante simple, no piensa a largo plazo, sólo en el aquí y ahora, pero conforme va descubriendo esta nueva América, va cambiando, empieza a ver el mundo de otro modo y sus motivaciones cambian constantemente, pero sobre todo es una persona leal, y eso se lo demuestra constantemente a Wednesday, que podría ser el gran interrogante de la novela y aparece y desaparece del camino de Sombra a su antojo, pero son otros secundarios los que dan la chispa a la novela, como Laura, la fallecida esposa de Sombra o Sam, una chica a la que recoge en la carretera.
El relato de Gaiman me resultaba confuso y parecía que la novela no tenía rumbo durante muchas páginas y eso me frustraba muchísimo a pesar de la musicalidad de su pluma. A veces se me escapaba qué estaba sucediendo en las páginas y eso hizo que me costará más de media novela engancharme. Quienes han seguido mi odisea con esta novela lo saben. Pero a la vez todo me resultaba extrañamente fascinante, como si hubiese una especie de magia en el libro. Y, por supuesto, todo un desfile de dioses de todas las mitologías habidas y por haber.
No sabría describir si he disfrutado o no de American Gods. Sé que muchos pensarán que, sencillamente, no he entendido la historia, no voy a decir que no tienen razón porque no sé si la he entendido. Lo que tengo clarísimo es que se trata de una novela que no tiene igual, que es única y especial y que puede que yo no haya sabido ver del todo lo que hace que tanta gente ame esta novela, que para mí, más que una lectura ha sido una experiencia. Espero que si alguno de vosotros, al otro lado de la pantalla, absorbido por alguno de los dioses de la tecnología, decide hincarle el diente, sepa disfrutarla al cien por cien y no tenga esta sensación que tengo ahora mismo de extrañeza cuando pienso en American Gods.
Valoración
Ficha
¿Es que no hay nada sagrado?
Días antes de salir de prisión, la mujer de Sombra, Laura, muere en un misterioso accidente de coche. Aturdido por el dolor, emprende el regreso a casa. En el avión, se encontrará con el enigmático señor Wednesday, que dice ser un refugiado de una guerra antigua, un dios y también el rey de América.
Juntos se embarcan en un viaje extraño a través de los Estados Unidos, mientras una tormenta de dimensiones épicas amenaza con desencadenarse.
Poco a poco descubriremos que Wednesday es una encarnación de Odín y que está reclutando viejos dioses, cuyos poderes han disminuido por el tiempo y la falta de creyentes, para participar en una guerra contra los nuevos dioses: aquellos que conforman la tecnología moderna.
Sombra ha salido de prisión antes de tiempo, pero el motivo no es nada alegre. Su mujer, Laura, ha fallecido en un aparatoso accidente. Sin embargo, en su viaje a casa conoce a un tipo muy extraño, Wednesday, que no sólo sabe quien es él con pelos y señales, sino que le ofrece un trabajo que Sombra no podrá rechazar. Pero en su nueva aventura, Sombra descubrirá que todo aquello que no creía real, lo es, y que parece que el destino de todos está en sus manos.
Mi relación con este libro viene marcada por el amor-odio, así que quizás debería empezar por ahí y explicaros porqué, pero es que ni yo misma sé muy bien porqué, sólo sé que me alegro de haberlo terminado y que probablemente no vuelva a acercarme a él nunca más, porque a pesar de lo increíble de la historia y lo maravillosa que resulta y lo bien construida que está, es el libro que más me ha costado leer en toda mi vida y no quiero repetir la experiencia.
Sombra está a punto se salir de la cárcel tras una reducción en su condena, pero inesperadamente, 3 días antes de su salida oficial le permiten abandonar la prisión, el motivo: la muerte de su esposa Laura. Sombra, algo hundido al conocer las circunstancias que rodean a la muerte de Laura, conoce a un misterioso tipo, Wednesday, que le ofrece un trabajo, él sólo tendrá que hacer lo que le manden y recibirá una buena cantidad de dinero. Sin embargo, su viaje va a estar rodeado de historias extrañas y Sombra conocerá a los dioses que ahora campan por tierras norteamericanas y que se enfrentan a un terrible enemigo, los dioses de la tecnología.
No sé cómo sería la historia que originalmente fue publicada ya que la que llegó a mis manos fue la edición revisada por motivo del décimo aniversario de su publicación. En el epílogo a esta historia, el propio Gaiman dice que tuvo que cambiar muchísimas cosas de la historia porque sus editores le dijeron poco menos que era un coñazo tal y como estaba, así que la novela vio la luz con otro aspecto y ahora nos llega tal y como Gaiman quiso contarla.
La mitología propia de American Gods es fascinante, así como todos los personajes y los secretos que se tejen entre ellos, pero es una novela terriblemente lenta y pesada. Pasan miles de cosas pero a la vez da la sensación de que no pasa nada y de que te has atascado en la misma página. Paré de leer en varias ocasiones y me tuve que obligar a seguir leyendo y aunque la pluma de Gaiman me tenía fascinada y encontraba interesantísima la historia de fondo, no lograba engancharme de ninguna de las maneras hasta que alcancé las últimas doscientas páginas, en las que la novela pasó de ser un sufrimiento a mantenerme completamente pegada.
Sombra es un personaje que resulta complejo en su simplicidad. Vamos, no tiene un trasfondo demasiado profundo y es bastante simple, no piensa a largo plazo, sólo en el aquí y ahora, pero conforme va descubriendo esta nueva América, va cambiando, empieza a ver el mundo de otro modo y sus motivaciones cambian constantemente, pero sobre todo es una persona leal, y eso se lo demuestra constantemente a Wednesday, que podría ser el gran interrogante de la novela y aparece y desaparece del camino de Sombra a su antojo, pero son otros secundarios los que dan la chispa a la novela, como Laura, la fallecida esposa de Sombra o Sam, una chica a la que recoge en la carretera.
El relato de Gaiman me resultaba confuso y parecía que la novela no tenía rumbo durante muchas páginas y eso me frustraba muchísimo a pesar de la musicalidad de su pluma. A veces se me escapaba qué estaba sucediendo en las páginas y eso hizo que me costará más de media novela engancharme. Quienes han seguido mi odisea con esta novela lo saben. Pero a la vez todo me resultaba extrañamente fascinante, como si hubiese una especie de magia en el libro. Y, por supuesto, todo un desfile de dioses de todas las mitologías habidas y por haber.
No sabría describir si he disfrutado o no de American Gods. Sé que muchos pensarán que, sencillamente, no he entendido la historia, no voy a decir que no tienen razón porque no sé si la he entendido. Lo que tengo clarísimo es que se trata de una novela que no tiene igual, que es única y especial y que puede que yo no haya sabido ver del todo lo que hace que tanta gente ame esta novela, que para mí, más que una lectura ha sido una experiencia. Espero que si alguno de vosotros, al otro lado de la pantalla, absorbido por alguno de los dioses de la tecnología, decide hincarle el diente, sepa disfrutarla al cien por cien y no tenga esta sensación que tengo ahora mismo de extrañeza cuando pienso en American Gods.
3,5
Título: American Gods X aniversarioGracias a Roca por el ejemplar para la reseña.
Título orginal: American Gods X anniversary
Autor: Neil Gaiman
Traducción: Mónica Faerna
Año: 2001 y 2011
Edición española: 2012
Editorial: Roca
ISBN: 9788499185422