La otra cara de la guerra.
Historia
Lina no sabía que aquel día sería el último en mucho tiempo que pisaría su tierra, que un tren se la iba a llevar lejos de allí y que iba a sufrir e iba a temer por su vida y por la de los suyos cada segundo. No sabía que tendría que trabajar hasta la extenuación por un mendrugo de pan y que jamás volvería a ver a su padre.
Lituania sufrió el acoso de la unión soviética y algunos de sus ciudadanos se vieron obligados a vivir en campos de concentración bajo condiciones infrahumanas. Un relato sobre la otra cara de la Segunda Guerra Mundial que queda oculta por el horror nazi pero que no deja de ser escalofriante.
Opinión personal
Cuando hablamos de la Segunda Guerra Mundial viene a nuestra mente el holocausto nazi, pero en otros lugares sucedieron cosas en las que casi nadie repara, horrores tan graves como los cometidos por Hitler y los suyos. Ruta Sepetys se adentra en esta otra historia de la mano de Lina, una joven lituana que se ve obligada a abandonar su hogar junto a su madre y su hermano y tomar un tren rumbo a un campo de trabajo en Siberia. Un relato desgarrador sobre los gulags y sobre una chica que encontrará fortaleza dentro de sí misma para poder sobrevivir en un lugar hostil.
Lina quiere dedicarse al arte, adora a Munch y pasa gran parte de su tiempo dibujando, no sabe que esos dibujos la salvarán de la locura misma cuando unos agentes se presentan en su casa y se llevan casi a la fuerza a su madre y a su hermano. No saben donde está su padre ni a donde los llevan, sólo saben que quizás su destino sea la misma muerte, pero en el camino encontrarán buenas personas y será duro, pero siempre hay sitio para la esperanza e incluso el amor.
A través de la voz de Lina, Sepetys nos cuenta una historia humana y llena de dolor y momentos duros. Es capaz de trasladarnos a la fría siberia, a los campos de trabajo donde Lina y su familia tendrán que dejarse el alma. No es un relato suavizado ni edulcorado, es duro y real, narra el sufrimiento de un pueblo, de una familia. Es imposible despegarse de las páginas durante el relato de Lina, que siempre tratará de encontrar a su padre junto a su hermano Jonas, obligado a madurar por las circunstancias y el joven Andrius, que está en una situación similar a la de ellos. Tratará de descubrir las razones por las que se han llevado a su padre y a ellos mientras lucha por sobrevivir.
Lina es una niña bien que se ve despojada de todo en el momento menos esperado, esas circunstancias y su perseverancia, la harán madurar y convertirse en una luchadora admirable, consigue mantener a su familia unida y no descansa en la búsqueda de su padre. Quizás en otras circunstancias Lina habría sido una chica muy distinta, pero lo cierto es que Sepetys ha conseguido una protagonista que casa con el relato y lleva todo el peso de la historia. La madre de Lina es una mujer inteligente y sabe lo que es mejor para su familia sin dejar de lado sus principios y los de su marido, ya que ellos no son marionetas de los soviéticos. Como ya he mencionado, Jonas, el pequeño se ve obligado a crecer a marchas forzadas y a convertirse en un hombre, aunque su parte de niño está siempre presente y no deja de ser el eslabón débil de la familia. Personajes como Andrius o Kretzsky resultan muy interesantes, el primero por su relación con Lina y el segundo porque consigue sorprender al lector.
Un abanico de personajes se despliegan en el relato, todos con su historia y algo que decir, aunque el relato se centra plenamente en Lina y su familia, Sepetys consigue que sintamos curiosidad por las circunstancias que llevaron a los demás a esa situación.
La forma en que la autora nos traslada a los años cuarenta y nos mete con Lina en el tren es brutalmente realista. He sido capaz de sentirme con Lina, hacinada en un tren, cavando fosas, helándome de frío. A pesar de ser la primera novela que publica, se nota que tiene un arduo trabajo de investigación detrás así como mucho cuidado en cada palabra que se plasma, porque, a pesar de todo, es una historia humana y no se deja ensombrecer por ideas políticas, sólo los hechos, que hablan por sí solos.
Recomendadísima, sobre todo a los amantes de las historias duras y que quieran empaparse un poco de una realidad no tan conocida como es el horror que sufrieron los refugiados lituanos en los gulags. Entre tonos de gris es una lectura dura, pero fácil de leer, que te atrapa y te llega dentro por muchas razones y que nos muestra que, entre tanta oscuridad, puede haber un poco de luz.
Valoración
Ficha
Junio de 1941, Kaunas, Lituania. Lina tiene quince años y está preparando su ingreso en una escuela de arte. Tiene por delante todo lo que el verano le puede ofrecer a una chica de su edad. Pero de repente una noche, su plácida vida y la de su familia se hace añicos cuando la policía secreta soviética irrumpe en su casa llevándosela en camisón junto con su madre y su hermano. Su padre, un profesor universitario, desaparece a partir de ese día.
A través de una voz narrativa sobria y poderosa, Lina relata el largo y arduo viaje que emprenden, junto a otros deportados lituanos, hasta los campos de trabajo de Siberia. Su única vía de escape es un cuaderno de dibujo donde plasma su experiencia, con la determinación de hacer llegar a su padre mensajes para que sepa que siguen vivos. También su amor por Andrius, un chico al que apenas conoce pero a quien, como muy pronto se dará cuenta, no quiere perder, le infunde esperanzas para seguir adelante. Este es tan solo el inicio de un largo viaje que Lina y su familia tendrán que superar valiéndose de su increíble fuerza y voluntad por mantener su dignidad. ¿Pero es sufi ciente la esperanza para mantenerlos vivos?
Lina no sabía que aquel día sería el último en mucho tiempo que pisaría su tierra, que un tren se la iba a llevar lejos de allí y que iba a sufrir e iba a temer por su vida y por la de los suyos cada segundo. No sabía que tendría que trabajar hasta la extenuación por un mendrugo de pan y que jamás volvería a ver a su padre.
Lituania sufrió el acoso de la unión soviética y algunos de sus ciudadanos se vieron obligados a vivir en campos de concentración bajo condiciones infrahumanas. Un relato sobre la otra cara de la Segunda Guerra Mundial que queda oculta por el horror nazi pero que no deja de ser escalofriante.
Cuando hablamos de la Segunda Guerra Mundial viene a nuestra mente el holocausto nazi, pero en otros lugares sucedieron cosas en las que casi nadie repara, horrores tan graves como los cometidos por Hitler y los suyos. Ruta Sepetys se adentra en esta otra historia de la mano de Lina, una joven lituana que se ve obligada a abandonar su hogar junto a su madre y su hermano y tomar un tren rumbo a un campo de trabajo en Siberia. Un relato desgarrador sobre los gulags y sobre una chica que encontrará fortaleza dentro de sí misma para poder sobrevivir en un lugar hostil.
Lina quiere dedicarse al arte, adora a Munch y pasa gran parte de su tiempo dibujando, no sabe que esos dibujos la salvarán de la locura misma cuando unos agentes se presentan en su casa y se llevan casi a la fuerza a su madre y a su hermano. No saben donde está su padre ni a donde los llevan, sólo saben que quizás su destino sea la misma muerte, pero en el camino encontrarán buenas personas y será duro, pero siempre hay sitio para la esperanza e incluso el amor.
A través de la voz de Lina, Sepetys nos cuenta una historia humana y llena de dolor y momentos duros. Es capaz de trasladarnos a la fría siberia, a los campos de trabajo donde Lina y su familia tendrán que dejarse el alma. No es un relato suavizado ni edulcorado, es duro y real, narra el sufrimiento de un pueblo, de una familia. Es imposible despegarse de las páginas durante el relato de Lina, que siempre tratará de encontrar a su padre junto a su hermano Jonas, obligado a madurar por las circunstancias y el joven Andrius, que está en una situación similar a la de ellos. Tratará de descubrir las razones por las que se han llevado a su padre y a ellos mientras lucha por sobrevivir.
Lina es una niña bien que se ve despojada de todo en el momento menos esperado, esas circunstancias y su perseverancia, la harán madurar y convertirse en una luchadora admirable, consigue mantener a su familia unida y no descansa en la búsqueda de su padre. Quizás en otras circunstancias Lina habría sido una chica muy distinta, pero lo cierto es que Sepetys ha conseguido una protagonista que casa con el relato y lleva todo el peso de la historia. La madre de Lina es una mujer inteligente y sabe lo que es mejor para su familia sin dejar de lado sus principios y los de su marido, ya que ellos no son marionetas de los soviéticos. Como ya he mencionado, Jonas, el pequeño se ve obligado a crecer a marchas forzadas y a convertirse en un hombre, aunque su parte de niño está siempre presente y no deja de ser el eslabón débil de la familia. Personajes como Andrius o Kretzsky resultan muy interesantes, el primero por su relación con Lina y el segundo porque consigue sorprender al lector.
Un abanico de personajes se despliegan en el relato, todos con su historia y algo que decir, aunque el relato se centra plenamente en Lina y su familia, Sepetys consigue que sintamos curiosidad por las circunstancias que llevaron a los demás a esa situación.
La forma en que la autora nos traslada a los años cuarenta y nos mete con Lina en el tren es brutalmente realista. He sido capaz de sentirme con Lina, hacinada en un tren, cavando fosas, helándome de frío. A pesar de ser la primera novela que publica, se nota que tiene un arduo trabajo de investigación detrás así como mucho cuidado en cada palabra que se plasma, porque, a pesar de todo, es una historia humana y no se deja ensombrecer por ideas políticas, sólo los hechos, que hablan por sí solos.
Recomendadísima, sobre todo a los amantes de las historias duras y que quieran empaparse un poco de una realidad no tan conocida como es el horror que sufrieron los refugiados lituanos en los gulags. Entre tonos de gris es una lectura dura, pero fácil de leer, que te atrapa y te llega dentro por muchas razones y que nos muestra que, entre tanta oscuridad, puede haber un poco de luz.
Título: Entre tonos de grisGracias a Maeva por el ejemplar.
Título original: Between Shades of Gray
Autora: Ruta Sepetys
Traducción: Isabel González-Gallarza
Año: 2011
Edición española: 2011
Editorial: Maeva
ISBN: 9788415120254
Tengo muchísimas ganas de leer este libro, fue una de las novedades de Maeva que más me llamó la atención porque tiene una portada preciosa y por tu reseña tiene muy buena pinta, espero leerlo pronto
ResponderEliminarbesos
Tengo ganas de leerlo. Todo el tema nazi me suele gustar bastante por que tengo curiosidad.
ResponderEliminarBesos
@Espe creo que en la reseña está bastante claro, pero no es una novela sobre el holocausto nazi, sino sobre los gulags
ResponderEliminarLo leí la semana pasada y me encantó. Me ha gustado cómo a pesar de ser un libro duro, a la vez cuenta una historia bastante optimista y esperanzadora.
ResponderEliminar¡Un besito!
Tiene muy buena pinta la verdad, este tipo de libros me suele gustar mucho así que seguramente le de una oportunidad :D
ResponderEliminarGracias por la reseña Niva ^^
Un beso!
No me llama mucho la verdad, gracias por tu opinión, un saludo
ResponderEliminarEste libro, a pesar de ser súper duro, me llama la atención, suelen gustarme este tipo de novelas.
ResponderEliminarParece una historia con mucha fuerza, de esas que te dejan algo positivo, abra que buscarlo.
ResponderEliminarSaludos :)
A mi me llama esta tematica, espero leerlo!
ResponderEliminarMuy buena reseña =)
ResponderEliminarContra más opiniones leo, más ganas tengo de coger el libro por banda.
Besotes
Y no sabes lo simpática y amorosa que es Ruta♥ Desde que la conocimos el lunes y POR FIN me hice con el libro me muero por empezarlo.
ResponderEliminarPD: Nos vemos a finales de mes *.*
se parece muchisimo al diario de Ana Frank. tambien es una niña que relata su historia como adolescente y el tiempo de dos años cuando tuvo que ocultarse de los nazis en Ámsterdam, durante la Segunda Guerra Mundial. tambien se enamoro de un niño que compartia la misma situacion y se va con con su madre, su hermana y su padre, luego los descubren y los separan a todos... es una historia veridica, relatada por ella misma en sus diarios (ella queria ser escritora) en fin, es muy parecida. se lasrecomiendo tambien. saludos!! niva hiciste un gran trabajo con la reseña!!
ResponderEliminarbesos!!
Un libro tremendo. Un descenso a la tortura a base de hambre y frío en la Siberia más inhospita. Cuando piensas que la suerte de los protagonistas no puede ser peor, todo empeora aún más. Lo peor, que fue verdad!
ResponderEliminar