Reseña: Destrózame

Caricias que matan.

Juliette no ha tocado a nadie desde hace exactamente 264 días. La última vez que lo hizo, ocurrió un accidente. Ahora está encerrada acusada de asesinato y vigilada por un gobierno dictatorial: el Restablecimiento.
Escapar es impensable hasta que Adam entra en la celda de Juliette. Su encuentro es la chispa que enciende una esperanza de libertad, pero Warner, el hijo del líder del gobierno, tiene otros planes para Juliette. Su obsesión por la joven alcanza límites insospechados, y por mucho que ella se esfuerce en odiarle, descubre que no es tan fácil. Juliette tendrá que decidir si convertirse en el arma de Warner o unirse a la revolución.

La expectación que viene creando esta novela de un tiempo atrás ha sido grande. Desde que supe de su existencia quise leerla y más cuando descubres lo adorable que es su autora. Destrózame cumple con lo que promete, es una novela trepidante, que juega con elementos de aquí y de allá de forma brillante para crear un marco complejo que puede dar mucho de sí.
El tacto de Juliette puede ser mortal, por ello, lleva encerrada mucho tiempo en una celda. Aislada del mundo. Hasta que meten a un chico en su celda. Un chico, Adam, que le resulta vagamente familiar. Será a partir de ese momento cuando todo cambie para Juliette, porque su habilidad, que para ella es una maldición, es algo codiciado fuera de esas cuatro paredes y tendrá que luchar para mantenerse fiel a sí misma.
Destrózame es una antesala, una introducción. Es una novela que nos presenta un mundo devastado y una chica con una habilidad especial. Su sólo tacto puede resultar mortal y, de hecho, lleva cerca de un año aislada del resto del mundo por miedo a lo que pueda suceder. Pero hay mucho más detrás, un transfondo distópico que parece haber escalado de forma exponencial, organizaciones gubernamentales de dudosa calaña y, como no, los buenos, que, en secreto, tratan de devolver la cordura a un mundo devastado.
La pega que le encuentro a esta novela es precisamente lo introductoria que es. A pesar de que tiene momentos de auténtica tensión, se concentran en la mitad del libro y hacia el final, esperas que suceda algún giro de tuerca que no llega, dejándote una sensación de extrañeza, pero a la vez mucha intriga por saber que va a suceder a partir de ese momento.
Juliette es una de esas protagonistas que cae bien, su historia, todo su pasado, cómo la han tratado, despierta simpatía en el lector. Por suerte, no es una mojigata ni espera que nadie la salve a pesar del complejo de héroe que tiene Adam y su más que clara intención de no dejar que Juliette haga nada mientras esté él para protegerla. Son otros personajes, como Kenji o Warner los que realmente despiertan el instinto de Juliette y espero que tengan mucho por ofrecer. Adam me resulta un tanto anodino y muy estereotipado. Puede resultar atractivo, pero no deja de ser el mismo protagonista masculino de siempre.
El estilo de Mafi es impecable. Puesto que la novela está escrita desde el punto de vista de Juliette, juega con sus pensamientos, lo que otorga al libro un estilo muy particular, a veces caótico y otras veces muy metódico. Básicamente, cómo la mente humana. Ha sabido capturar muy bien la esencia de su protagonista, dándole las dosis exactas de dulzura, pero también creando una protagonista lo suficientemente cañera como para encajar en el mundo desolado del Restablecimiento.
No tengo duda alguna de que su continuación va a ser espectacular y de que esta es una saga que puede entrar entre mis favoritas. Sin embargo, a Destrózame le ha faltado un poco de chicha porque, como ya he dicho, pretende ser un libro introductorio y la autora, de seguro, se ha guardado unos cuantos ases en la manga para más adelante. Estoy ansiosa por saber qué le depara a Juliette.

Valoración

3,5

Ficha

Título: Destrózame
Título original: Shatter me
Autora: Tahereh Mafi
Traducción: Andrea Romero
Año: 2011
Edición española: 2014
Editorial: Oz Editorial
ISBN: 9788494172939

Gracias a Oz Editorial por el ejemplar para la reseña.